El Fuego de Eduardo Galeano, escritor uruguayo

El mundo es eso. Un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende".

Entendemos que cada fuego encendido trasciende mucho más allá de la propia vida. Cada una de nuestras acciones y nuestras decisiones cotidianas, cada manera particular de alimentar y expandir nuestro fuego, dejará una estela en nuestras generaciones futuras.

Aprender a brillar con luz propia es el camino para trascender en el futuro a través de las nuevas generaciones.