En un lugar lejano, en un país, que no está muy cerca de nosotros. En Francia, en una ciudad que se llama Paris hace algunos años, un grupo de artistas salían del teatro y vieron a muchas personas corriendo por todos lados
En un lugar lejano, en un país, que no está muy cerca de nosotros. En Francia, en una ciudad que se llama Paris hace algunos años, un grupo de artistas salían del teatro y vieron a muchas personas corriendo por todos lados. Las personas no se detenían, no hablaban entre ellas, no sonreían, sólo corrían y solamente se les escuchaba decir "llegó tarde, voy a perder el tren, va a cerrar el supermercado" Los artistas se preocuparon, y se les ocurrió una idea. Ir a contar poemas a todas las personas que iban apuradas por la ciudad. ¿Pero cómo los iban a contar en una ciudad llena de murmullos? Se les ocurrió otra idea y crearon los "susurradores" tubos de colores, dónde sólo entran bellos sonidos, alguien que los cuenta y del otro lado, alguien que los escucha. Como si fuera un secreto, de esos que se guardan en el corazón para alegrar el día de quien lo recibe.
Así dimos comienzo al primer transitar del año en la biblioteca del jardín. Las salas de 3, 4 y 5 años de ambos turnos compartimos ricos momentos de disfrute literario junto a los susurradores. Abrimos una puerta a la fantasía en el jardín y junto a ella invitamos a las familias a susurrarse canciones, poemas, rimas, secretos hermosos. Detenernos algunos minutos para compartir, en el mundo de la fantasía e imaginación.
Talleres Literarios junto a las Seños Carla (TM) y Nahir (TT)